miércoles, 9 de julio de 2008

Desde República Dominicana: Daniel Montoly


Balada de los suburbios


Te escondes tras el makeup y el rimel,
triste, con la nostalgia retroactiva
en el útero marchito.
Masticas los malos días
con mecánica alegría de píldoras
y dejas hundir tus labios
en la parodia de la televisión.
El cartero no trajo hoy rosas para ti,
tampoco una notita
con la palabra: Te quiero.
Loretta, las flores del jardín
se llevaron su perfume
hasta confines foráneos.
Y tú, te aferras a su fotografía,
juras jamás volver
a pararte frente a la ventana
para no ver en el horizonte, a ese niño
de ojos vivaces y pelito negro,
ir en bicicleta a cazar relámpagos.





Amor...


Y fui un alma muerta
hasta conocerte,
un grabado
virgen
en sábanas mojadas

Amor...
Ahora, dime:
¿Con qué
boca te nombro
sí mi boca
olvidó
escupir
en tierra húmeda?

Pero…
donde la verbena
y el espárrago
te hieren
amor.
Ahí pondré la mano
hasta escucharte
decir: ...
"quiero".





OIL OVER CANVA IN BROOKLIN


Es jueves 14 de noviembre. Las rosas

lucen como pájaros sin alas en el jarrón,

y el saxo de Coltrane, redime al jazz

en las azarosas cruces

levantadas, sobre el hielo vespertino.

Dos cuervos observan

los movimientos humanos

amenazar a su prole

en la cornisa de una vieja factoría.

Un viejo, inmigrante, se desplaza

bastón en manos rumbo a Canaán,

para edificar ciudadelas de palabras,

en sus piedras introvertidas.

Hoy el universo, es caballo.

Domable a la mecánica del electrodo;

se le ve refulgir, entre las oprobiosas

dudas de un mercader de joyas,

que con su sombrero jassidy,

se espanta moscas metafísicas del rostro.





DARK AFTERNOON IN HARLEM


Bajo del taxi en The New Canaan Tabernacle.

Al sentarme huelo orines en los muros,

escucho esas viejas canciones,

arrastradas por el viento,

salir, melancólicas,

por las ventanas de Harlem.

Distingo la sombra de James Brown

cruzar la Lenox Avenue

y desaparecer entre las luces

del viejo teatro Apollo.

En otra esquina, Mingus y su bajo

me despiertan, a ese otro mundo,

soterrado y frío,

de árboles, y sogas grises,

en lugar de pájaros.

Siento el espíritu de un fugitivo

llegando al Norte, y puños al aire, lo saludo.

Respiro en Harlem, los versos libertos

de Frederick Douglass,

y Langston Hughes,

en los ojos obnubilados

del maestro

Dizzy Gillespie.


Daniel Montoly©
daniel22442000@yahoo.com
http://www.danielmontoly.blogspot.com/

Daniel J. Montoly (República Dominicana, 1968) estudiante de la carrera de derecho en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).

3 comentarios:

Gabriela dijo...

Se que te debo mil visitas por tu casa... pero ya que hoy vienen tus letras hacia mi, otra vez recorro tu estilo personal en los versos y sigo insistiendo que me gusta. Felicitaciones.

Gabriela Abeal

Daniel J. Montoly dijo...

Gracias querida Gaby, ya se te extrañaba. Llevaba un tiempo preguntándome por ti.

Besos y abrazos. Daniel

Gabriela dijo...

Aquí estoy, yerba mala nunca muere y cuando puede reaparece.
Gracias por andar pregutándote, te leo, cariños... Gabriela.